martes, 6 de octubre de 2009

Un instante de felicidad


Cuando ya no eres capaz de levantarte por la mañana y piensas que ya perdiste todo por lo que luchar, que no queda nada en este mundo capaz de hacerte salir de este trance interminable. En el instante en que lo das todo por perdido y estás a punto de lanzarte por la borda, suceden cosas como esta:


Hacía mucho que había olvidado cuánto espacio es capaz de abarcar un solo sentimiento. Ya no recordaba las cosas tan simples pero maravillosas que el mundo es capaz de ofrecer.

Te despiertas una mañana y todo tu cuerpo te parece extraño. Ves tu habitación tan desordenada que te provoca una sonrisa el pensar que no encontrarás algo que buscas en todo ese lío de cosas. Sales a la calle y sientes la necesidad de sonreirle al todo el mundo que se cruza en tu camino. Sientes ese impulso frenético que te alza más y más sin que parezca haber límite.

Cuando una flor te parece la cosa más bella del mundo y tienes la necesidad de tumbarte y parar a mirar el cielo y descubrir formas en las nubes. Es entonces cuando abres los ojos realmente y te das cuenta de todo lo que te has estado perdiendo.

Hacía demasiado que no tenía un instante de felicidad completa.

2 comentarios:

  1. La felicidad pueden llegar a ser cosas tan simples pero tan bellas, que a veces nos soprendemos porque creemos que no son ciertas. Pero lo son, tanto como el aire que respiramos. Nunca hay que desesperar, porque siempre habrá alguien dispuesto a frenarnos...piensa en mi :P

    Y recuerda siempre esa lección ;)


    tQm!! ^^

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  2. La verdadera felicidad está siempre en las cosas que menos esperamos, a las que menos importancia le damos pero son las que más nos llenan.

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