Es en noches frias como estas cuando más recuerdo el calor que emanaba tu cuerpo para calentar el mio. El recuerdo de unos labios moviéndose al mismo compás e intercambiándose suspiros.
El movimiento de una mano acariciando más allá de lo permitido y de forma casi agresiva.
La presión que ejercen dos cuerpos que se estremecen de placer ante un beso, una caricia, un mordisco, un arañazo o el más breve de los susurros.
Recuerdo esa sensacion y me siento sorprendentemente feliz.
Normal... Esque mis manos son mis manos... Y es loq eu tiene, que provocan adicción... =) Muahahahaha!!!
ResponderEliminarT kiero stupida!